Creo fírmemente que para ser un buen mago, un artista mago, uno debe empaparse de tantas formas de creación artística como le sea posible. Creo que es una forma estupenda de enriquecerse y aprender. Por eso soy un espectador habitual de todo tipo de espectáculos: música, teatro, circo, etc. Pocas cosas me entristecen/asombran más, que ver a un mago que pretende ser artista y que cada vez que abre la boca, deja patente su incultura.
Por fortuna en los últimos años en Burgos, podemos disfrutar de algunos espectáculos de primerísima calidad y en las últimas semanas hemos tenido 2 magníficos ejemplos en el campo del circo: El Circo Rasposo nos presentó en el parque del Parral su último espectáculo "Le Chant du Dindon" y por otro lado pudimos ver en el Teatro Principal "Nebbia" una creación conjunta del circo Éloize y la compañía teatral Sunil.
Se trata de 2 espectáculos bien diferenciados, por lo que quizás establecer comparaciones sea un error de base, pero como este es mi blog hago lo que quiero...
Partimos de que ambos son espectáculos con mayúsculas y de que podemos sentirnos privilegiados de que visiten nuestra ciudad, con sinceridad, en mi opinión merece más la pena asistir a estos espectáculos, que comprar el último truco de magia que se ha puesto de moda, pienso que se aprende infinitamente más.
La compañía Rasposo, llegaba por segunda vez a Burgos y lo digo de partida, la primera vez que los vi hace creo 4 años, fue un shock para mí, casi una iluminación. Ningún otro espectáculo de magia o de otro tipo, me ha influido tanto a la hora de concebir mi propio trabajo.
Se trata de un espectáculo de circo coral, donde uno se siente inmerso desde el primer momento en el mundo de estos artistas, las fronteras físicas y temporales entre actores y público se difuminan, uno no sabe si el espectáculo ha comenzado o simplemente son así siempre en su vida cotidiana. Llegas literalmente a sentir su sudor, su esfuerzo durante los ejercicios más exigentes y todo ello se envuelve en una trama sencilla, las pequeñas historias de las relaciones entre los miembros de la troupe, sus amores, celos... envueltos en los ritmos balcánicos que toca su pequeña orquesta.
Nebbia es un espectáculo con un formato más teatral, nos muestra una escenografía exquisita, posiblemente la mejor iluminación que he disfrutado en mucho tiempo (los efectos dramáticos conseguidos a través del uso de la luz son preciosos) y sin embargo en su apuesta por conjugar el mundo del circo y el teatro, creo que hay momentos en los que se producen algunos desequilibrios y alguna de las facetas se impone, concretamente creo que la parte circense se ve debilitada, la pureza de algunos números circenses es sacrificada para lograr un efectos estetico mas "espectacular." Con todo la trama va creciendo en emoción y al final del espectáculo, uno siente un nudo que le sube por la garganta.
Me siento orgulloso de que en nuestra ciudad haya un público ávido por ver propuestas escénicas de una calidad tan alta, realmente es un estímulo para ponerse las pilas y saber que cuando salimos a escena, algunos espectadores no se van a conformar con el típico show de magia de 4 juegos comprados en una tienda y una charla copiada a otros magos.
Me encantaría leer vuestras opiniones sobre estos espectáculos, sobre lo que he contado, o sobre lo que os de la gana.
¡Hasta pronto!
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Actualmente estoy con otros asuntos y me he encontrado que La Magia no se incluye habitualmente dentro del arte escénico. Por ejemplo hablamos de música: pop, flamenco, etc. Es como algo menor. Y no se de quien será la culpa... Aunque si es tratada como tal en la organización de actos culturales. Dentro de las actividades culturales que se realizan, si se suele encasillar dentro del arte escénico. Después pasaríamos a definir cultura y arte...Y tirando de la cuerda te das cuenta hacia donde tenemos que dirigir este "arte".
ResponderEliminar¿porque crees tú Roberto, que la magia no se incluye habitualmente dentro del arte escénico? Yo tengo algunas teorías, pero me gustaría saber lo que piensan los demás.
ResponderEliminarQuizás es meterse en camisas de once varas, pero hay que tener en cuenta que la magia se ha relacionado desde hace mucho tiempo con lo oculto. De hecho en la RAE para definir la magia o ilusionismo la denomina magia blanca para diferenciarlo de lo otro. La magia es lo que no hace la bruja Lola.
ResponderEliminarY por otro lado, no me cabe la menor duda que el mago es el que dignifica la magia. Y para entenderlo podemos poner un ejemplo. ¿Es lo mismo un cuentachistes que un monologuista? Pues no. Yo en una cena igual que cuento un chiste (por cierto muy mal) pues también hago un "truco" pero no por ello soy monologista, ni mago. Por ello me gusta cuando cambiamos el nombre al mago y lo llamamos Ilusionista. Me suena más profesional. Yo propondría que los magos profesionales o los que no lo son pero actuan como tal, los llamemos ilusionistas. Ese sería el primer paso para diferenciar el contador de chistes del monologuista. Ahora bien, pregunto, ¿Gila era un monologuista? Yo creo que los grandes magos dignifican el arte, pero a nivel general. Pero, por ello, no quiere decir que porque en el cartel ponga mago-ilusionista ya está todo hecho. El espectador no es tonto y menos ahora que a mi entender, ya tienen una cultura mágica mayor que hace unos años. El espectador ya pide un mínimo, y no consiste en presentar un truco. Sino que quiere que le entretengan, que se emocione, que vea la imposibilidad, que le haga pensar. Y para conseguir eso, no se trata de conocer como se hace un truco, hacerlo, y que no te pillen. Se puede escribir mucho sobre lo que el espectador valora, a mi entender aparte de lo dicho: emoción, entretenimiento, imposibilidad,..., ORIGINALIDAD...
Bueno, y para terminar, y suavizando un poco el tema, creo que entre la profesión de Gestores Culturales (no hablo de políticos, concejales, etc) la magia está mejor considerada y si se incluye cuando organizan actividades escénicas. Creo que los festivales, congresos, etc, están ayudando, sobre todo porque hay calidad. (Y ya paro...)
Bueno, con algunas cosas de las que comentas estoy de acuerdo y con otras no tanto, pero como la discusión se alargaría demasiado, en una próxima entrada daré mi visión de por que la magia es considerada actualmente muy por debajo de otras artes escénicas.
ResponderEliminarPues espero la siguiente entrada...Por suerte, no podemos decir que no hay espectáculos de magia a un buen nivel. Yo por lo menos he vivido alguno. Y desde mi punto de vista, comparable a la mejor obra de teatro, circo, etc. Seamos optimistas. Hay muchos músicos, títeres, actores pero unos pocos los tocados por la mano ...del trabajo...
ResponderEliminarSolo quería decir una cosa: Un acto cultural no tiene que ser solo una actividad de ocio o entretenimiento, sino que después de digerirlo, no nos encontremos con el estómago y el cerebro vacio, sino lleno de sugerencias y emociones. Esto no es mio, pero lo suscribo y lo veo aplicable a la magia.
ResponderEliminarChao.